Actualmente mi trabajo se desarrolla en dos grandes direcciones: la figuración y la abstracción. Mi interés por la fotografía tiene su fundamento en la deconstrucción de los lenguajes estereotipados de la imagen que tiene su punto de partida en las técnicas estereotipadas de producciónn. En mi opinión para producir imágenes distintas, que interpelen al espectador, hay que producirlas con técnicas distintas. 

En los procedimientos que desarrollo para crear las imágenes abstractas o figurativas, son preponderantes los procedimientos manuales y la temporalidad humana, que permite la confluencia del pensamiento, la intuición y lo lúdico.

Mi obra figurativa es la construcción de una poética neobarroca, que intenta subvertir los códigos y convenciones del lenguaje fotográfico, al producir un  desanclaje entre la luz y lo fotografiado, como consecuencia de la técnica utilizada. Esta  técnica es una “foto performance lumínica”: En la oscuridad ilumino la escena  manualmente, al mismo tiempo que la recorro, en tomas de larga duración, creando con la luz un espacio de subjetividad que imprime relatos en la imagen. El uso de la luz y el color tienen un sentido plástico y conceptual. Nada puede conocerse sin las luces y las sombras. Los contrastes entre los fulgurantes brillos y la oscuridad acentúan el misterio de lo humano, lo bello, y a veces lo terrible.